APLICACIÓN PERSONAL

1.

La actualidad del mensaje.

 

1.1.

Las condiciones de las siete iglesias se reproducen en la actualidad.

 

1.2.

Los problemas denunciados son propios de la iglesia en todos los tiempos.

 

1.3.

Cada iglesia y cada creyente debe procurar confrontarse con las exhortaciones que el Señor hace a sus iglesias, rectificar la conducta desordenada y afirmarse en la correcta.

2.

Un resumen interesante del Dr. Lacueva.

 


“Las tentaciones a seguir al mundo y negar a Cristo vienen, como entonces, desde tres direcciones: (a) el miedo a la persecución; (b) la adulación a los poderosos; (c) la constante invitación a participar de los placeres de esta vida. Con todo eso, se puede asegurar la posición social, pero se pierde el fervor espiritual. Cuando los que se profesan cristianos ceden a estas tentaciones, caen en el deplorable estado de la iglesia de Laodicea, aunque todo parezca marchar en orden dentro de los muros del edificio que lleva el nombre de ‘templo’, ‘iglesia’ o ‘capilla evangélica’. Se pierde la convicción de pecado y no se advierte la necesidad de un sincero cambio de mentalidad delante del Señor ¿Cómo se va a golpear alguien el pecho en señal de contrición, si se cree en paz con Dios y en orden con la iglesia, sin advertir esa lastimosa tibieza que lleva a la indolencia, a la indiferencia, al compromiso con el mundo? Dice Hendriksen acerca de su propia experiencia:

El autor de este libro ha tenido contacto personal con esta actitud de parte de algunos miembros de iglesia. No hay nada que hacer con tales gentes. Con los que nunca han entrado en contacto con el Evangelio y, por ello son fríos a este respecto, se puede hacer algo. Con creyentes sinceros y humildes se puede trabajar con gozo. Pero con estos ‘somos-una-gente-tan-buena-aquí en Laoidicea’, no se puede hacer nada. Cristo mismo no los pudo soportar.
 

 

2.1.

No permita el Señor que ninguno caiga en la tibieza espiritual y se conforme con ella.